- ¿De dónde eres Alex? - Le pregunte con una voz suave y dulce
- Soy de Villaverde ¿y tu?- me contesto sonriendo un poco
- ¡No puede ser!- dije en un tono, gracioso y con una sonrisa picarona de destino o casualidad-¿Qué dices?¿Enserio?
- Que si ,que soy de Villaverde- esbozo una sonrisa centelleante y se rió de una forma muy suave pero sencilla y complicada a la vez- Pero...tu también eres de Villaverde.
-Si, también soy deVillaverde y vivo por la parte de la avanzada.¿Y tu?- dije
-No se decirte... ¿Conoces ``La cueva´´ ?- me dijo el dudoso
-Claro que conozco la cueva, si esta al lado de mi casa a cinco minutos.- conteste-Joder, el mundo es un pañuelo...
-Si...
Me quede en silencio mirando a través de la ventana viendo como subíamos aquellas curvas tan cerradas. Alex estaba mirando tambien por la ventana. Yo mismo pensaba... que pequeño es el mundo... no me sonaba de nada la cara de Alex, y eso que me conozco a casi toda villaverde. Pero no se seria el destino.
-Proxima parada Cotos- dijo el conductor a través del altavoz para que se escuchara bien en todo el autobús.
-Venga chicos, arriba, mover ese culo y andando que es gerundio.-dijo Maca, con una sonrisa de oreja a oreja y entusiasmada.
Nos levantamos de los asientos, y bajamos del autobús, aquel paisaje era precioso, sobre todo aquella fuente en forma de árbol.
-Id hacia aquella fuente ahora voy yo allí, mientras saco el mapa y la brújula- dijo Maca.
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