Sonaba
el telefono.
- -Hola
- -Hola Alex, ¿Qué tal?
- -Bien,¿y tu?
- -Bien, ya en segundo de bachillerato y la verdad bastante duro. ¿Y tu como has empezado primero de Bachillerato?
- -Bien, parece que hay que estudiar algo más pero bien.
- -Me alegro. Te llamaba además para decirte que el día 26 es mi cumpleaños. Lo se. -me interrumpió- y había pensado en invitarte a que vinieses, me gustaría mucho, la verdad.
- -Claro, ¿pero que día lo vas ha celebrar?
- -Me da igual ¿Qué día puedes tú?
- Espera que miro... el día 28 puedo, además cae en viernes
- Perfecto. A las 20:30 paso a recogerte. Vale.
Mis
cumpleaños a partir de los dieciséis años no eran como los típicos
cumpleaños de siempre, donde erais cientos y la madre y no tenias
tiempo de hablar con todo el mundo. No. Mi cumpleaños prefería poca
gente y importante para mi. En este caso invite a dos amigas y a
Alex. El plan era el siguiente: Ir a buscar a Alex a su casa, ir al
chino y allí estarían mis amigas. Y después una tetería a tomar
algo. La pena, es que Alex al tener dieciséis años en ese momento,
le ponían hora para llegar a casa. A las 00:00 tenía que estar en
casa. Gracias a Dios siempre tuve una buena relación con la madre de
Alex y la sigo manteniendo. Llegue a su portal. Llame. Y bajo.
Yo
le esperaba a las afueras en el portal. El salio del ascensor.
Llevaba unos vaqueros y una camiseta. Llevaba tiempo sin verle y no
supe que decirle nada más que abrió la puerta del portal. Creo que
no dije nada, y hubo una reacción de él que para mi fue el mayor
regalo de todos. Además recuerdo a la perfección que empezaba a
chispear. Me abrazo y me susurro al oido. Felicidades. Ese fue el
primer abrazo que recibí de él. Además salió solo de él... la
verdad... fue el mejor regalo de todos... Recuerdo que me llamaron
las chicas, y me dijeron que se iban a retrasar un rato y quedamos a
las 21:30 en el chino. Teniamos una hora por delante Alex y yo
solos... Y como empezo a chispear nos fuimos para mi casa. Estabamos
solos.
- ¿Quieres tomar algo Alex?
- No, gracias Omar
- ¿Seguro?- replique mirandole a los ojos
- Si, seguro- sonrio y sonrei – Bueno ¿Quiéres que te de mi regalo ya?
- Me da igual, pero a mi no me hace falta que me regales nada con que estes aquí conmigo es más que suficiente.- Le dije mientras le miraba a sus ojos con esa mirada tan penetrante.
- Ya... pero es un detalle...- Me entregó una cajita pequeña. Quite el papel de regalo, y vi un reloj verde, exactamente el mismo que llevaba el. Si te soy sincero yo nunca llevaba reloj porque no los aguantaba...pero aquel reloj era diferente.
- Es igual que el tuyo- dije
- Si, ¿Te gusta?
- Si, gracias- Me acuerdo que mire en que muñeca lo tenia puesto él y me lo puse.
Una
vez que me lo dio eran ya casi las 21:30 y fuimos al chino y cenamos.
Después de cenar sobre las 22:30 marchamos a la teteria. Alex nunca
había estado en una tetería y aquella vez para él era la primera.
Recuerdo que yo me pedi un batido de chocolate y mis amigas un batido
de fresa. Alex, se pidio un té. Nos lo tomamos tranquilamente y
hicimos un par de fotos. Recuerdo que estabamos con mi mp4 escuchando
música Alex tenia un casco y yo otro. Y justamente nos hicieron una
foto, los dos escuchando música con una sonrisa en la boca y yo
mirándolo a él...
Cuando
acabamos y eran las 23:45 salimos de la tetería y acompañamos a
Alex a su casa. Llovía a cantaros. Y teniamos dos paraguas. Alex y
yo en uno y las chicas en otro. Yo llevaba el paraguas y ademas iba
agarrado a la cintura de Alex. Llegamos a su portal. Las chicas se
despidieron de él. Y se apartaron.
- Bueno... - suspire y se me paso por la cabeza besalo pero no lo hice- gracias por venir, campeón.
- Nada, gracias a ti por invitarme.
- ¿Cuando nos vemos, Alex?
- No lo sé.
- Te llamo ¿vale?
- Vale. Adiós.
Entro
al portal, abrió la puerta del ascensor... y no supe nada de él
hasta días antes de su cumpleaños por eso de finales del mes de
noviembre.
